El Internet como amenaza al periodismo impreso

El Internet como amenaza al periodismo impreso

El artículo “El periodismo digital hace de todo menos dinero” de El País habla de la crisis económica del periodismo impreso, y de un periódico impreso alemán que ha sobrevivido. El subtítulo, “Di Lorenzo defiende los textos largos, la calidad, la profundidad. El éxito y los números le acompañan. 'Die Zeit', el semanario que dirige, va mejor que nunca,” es obviamente muy largo y descriptivo. También descriptiva es la entradilla que capta la atención del lector a través de información sobre la crisis periodística. El artículo, escrito por Laura Lucchini, utiliza frases bien cortas y breves, pero expresivas. Es decir, el lector aprende mucho en pocas palabras.

El artículo mismo habla de un periódico alemán, Die Zeit, que ha encontrado éxito durante un periodo de opresión económica. Su director Giovanni Di Lorenzo opina que la razón de la crisis económica del periodismo impreso es la Internet. Según él, las noticias en la Internet son peores que las de papel impreso porque son gratis, así que han abandonado la calidad y la credibilidad.

Di Lorenzo insiste que hay un futuro en el periódico impreso. Su periódico ha encontrado éxito por su orientación y profundización. Sin embargo, no ha renunciado a la Internet como forma de publicar sus noticias. De hecho, tiene una redacción digital donde se publica el periódico. No obstante, es difícil ganar dinero con esta  forma de periodismo, y Di Lorenzo dice, “El periodismo digital sabe hacer de todo menos traer dinero,” como sugiere el titular de este artículo. Quiere encontrar un método de ganar dinero con sus noticias en el Internet, pero hasta que pueda, va a mejorar su versión imprimida.  

Mientras leía el artículo, estaba sorprendida que un periódico impreso ha sobrevivido durante tiempos económicos difíciles. Aunque estoy de acuerdo que la información que hay en los periódicos impresos es mejor, pienso que no tiene un futuro ya que el Internet tiene un alcance más amplio. Es triste para las compañías de periódicos impresos, pero es algo al que tendrán que ajustarse, y trasladar sus negocios a la Internet.